Con la subida de temperaturas y el esperado momento de dejar las medias en el cajón, este producto se convierte en un auténtico imprescindible de temporada. No solo por su capacidad de hidratar y suavizar la piel, sino por su poder para transformarla visiblemente. Y si hablamos de fórmulas 100% naturales, la apuesta es aún más segura. Según explican los expertos de Arganour, firma española de cosmética natural, un buen aceite corporal de tacto seco no es un simple hidratante, sino que se encarga también de regenerar, proteger, reparar y embellecer la piel. De hecho, existen 10 formas versátiles y altamente efectivas de incorporarlo a tu rutina de belleza, y aquí te las descubrimos todas.
1. Ilumina zonas estratégicas del cuerpo
Al estilo del iluminador facial, el aceite seco puede aplicarse en zonas como los hombros, el escote o las clavículas para aportar un brillo natural que imita el reflejo del sol sobre la piel húmeda. Ideal para elevar cualquier look veraniego y perfecto para eventos al aire libre o sesiones de fotos improvisadas. Aplícalo con una brocha de maquillaje o con los dedos a pequeños toques, y lograrás ese efecto “piel de sirena” tan buscado en la temporada estival.
2. Sella la hidratación tras la ducha
Aplicar el aceite corporal directamente después de la ducha, cuando la piel aún está ligeramente húmeda, ayuda a retener el agua y sellar la hidratación. Esta técnica no solo proporciona un extra de elasticidad, sino que también fortalece la barrera cutánea natural, protegiéndola de la deshidratación. Un truco especialmente recomendado para quienes sufren de tirantez, descamación o viven en climas secos o con aire acondicionado.
3. Potencia el efecto del autobronceador
Mezclar unas gotas de aceite corporal con tu autobronceador mejora la aplicación, permite una distribución más homogénea del color y ayuda a difuminar los bordes, evitando líneas marcadas o zonas más oscuras. Para un acabado aún más profesional, aplica con una esponja de maquillaje previamente humedecida: el resultado será un bronceado uniforme, natural y con un extra de luminosidad que embellece al instante.
4. Personaliza el aroma
Convertir tu aceite corporal en un perfume de larga duración es tan sencillo como mezclarlo con unas gotas de tu aceite esencial favorito. Al aplicarlo directamente sobre la piel, especialmente en puntos de pulso como muñecas, cuello o detrás de las orejas, el calor corporal ayuda a que el aroma se libere lentamente durante horas, aportando una fragancia única y envolvente.
5. Dale ‘glow’ a tu base de maquillaje
¿Piel apagada? Añade una sola gota de aceite corporal a tu base de maquillaje líquida o en crema. Esta mezcla ayuda a crear un efecto radiante, suave y con mayor elasticidad visual. También mejora la trabajabilidad del producto, permitiendo que se difumine mejor y se adapte como una segunda piel. Es especialmente útil en climas secos o para looks de maquillaje natural con efecto buena cara al instante.
6. Convierte tu loción en un súper hidratante
¿Tu crema corporal habitual se queda corta? Suma unas gotas de aceite corporal para transformar tu loción diaria en un tratamiento intensivo. La combinación multiplica el poder nutritivo, mejora la textura y hace que la aplicación sea más fluida, especialmente después del sol, el mar o la piscina. Una forma sencilla de reforzar la hidratación sin necesidad de cambiar toda tu rutina.
7. Repara tu labial seco
Si tu barra de labios se ha vuelto seca o quebradiza, no la deseches. Coloca una gota de aceite corporal sobre la yema del dedo y mézclala con el labial antes de aplicarlo. Esto no solo lo rehidrata, sino que también mejora su deslizamiento y duración, dejando los labios más suaves, jugosos y sin grietas. Un tip perfecto para recuperar labiales mates o metálicos que han perdido cremosidad.
8. Transforma tus sombras en un look wet
Tanto en crema como en polvo, las sombras pueden convertirse en un producto efecto húmedo si se combinan con unas gotas de aceite corporal. Aplícalo con un pincel plano sobre el párpado para conseguir un acabado luminoso tipo glossy eye, muy popular en editoriales de moda y pasarelas. Un recurso infalible para un maquillaje de noche con efecto espejo.
9. Úsalo como prebase de maquillaje
Antes de aplicar tu base, distribuye una fina capa de aceite corporal sobre el rostro con ayuda de una brocha o esponja. Esto permite que la base se funda mejor con la piel y proporciona un acabado glow sin brillos excesivos. Es la alternativa natural perfecta a las prebases con siliconas, y además, cuida y protege tu piel mientras embellece.
10. Crea tu propio exfoliante casero
Si buscas una opción de exfoliación suave, pero efectiva, mezcla una cucharada de aceite corporal con azúcar o sal marina. Esta receta exprés elimina células muertas, mejora la circulación y deja la piel sedosa al instante. Además, al usar un aceite natural como el de Arganour, te aseguras de que tras el aclarado la piel quede nutrida, sin sensación grasa ni necesidad de aplicar crema adicional.